Inspirada en la singular belleza del carey, esta pieza ha sido cuidadosamente elaborada con piedras exóticas que evocan su apariencia natural. Ante la necesidad de preservar esta especie protegida, optamos por materiales que respetan la vida marina sin renunciar a la riqueza visual que lo caracteriza.
Este diseño representa una fusión entre estética y conciencia: una celebración de la naturaleza que no la compromete. Al elegir alternativas sostenibles, reafirmamos nuestro compromiso con la preservación de las especies y la creación de piezas atemporales con valores sólidos.
